Leche de coco casera

Fácil, económica y sin aditivos.
Sólo necesitas coco ralllado (200 gr.) y agua ( 800 ml.), remojarlos durante un tiempo (1 hora aprox.) integrarlos bien usando una batidora y pasar por el colador.
Si quieres que quede más densa, usa menos agua, y a la revés, si la quieres más ligera.
Si quieres endulzarla puedes añadir unos dátiles en el momento de integrar el coco y el agua.
Guarda la pulpa que ha sobrado para convertirla en harina. Para ello, la horneamos extendida en un papel o bandeja durante 30/60 minutos hasta que esté seca y dorada. Una vez fria, tritura con un procesador potente hasta conseguir una textura fina.
Todo se aprovecha.